Uno propone.....

Es fácilicimo programar el día, la semana, el mes, el año. Pensar que se va a hacer, a tal o cual hora. Decidir con quién juntarse o encontrarse, para pasar una tarde completa, o bien ir al cine, pub o café.
Todo esto viene de una estructuración mental, por lo menos en mi caso, por la cual yo puedo visualizar las horas y la cantidad de cosas que haré mientras este despierta, asi como una carta gantt, dandome espacios o licencias que si bien en algunos casos son obvias, otras son por permitirme muchos momentos de ocio. De esta manera arreglo mi carta gantt mental a mi ritmo y conveniencia.
Pero nada se puede hacer contra la naturaleza, y en caso que se pueda, la toma rápida de desiciones cuesta, con el fin modificar lo tan mentalmente estructurado.
Uno se resiste, quiere por sobre todas la cosas que sea como se ha pensado. Sin embargo uno debiera sortear solo lo presindible, y vivir como si fuera el último día, sin proyectar tanto o por lo menos sin estresarse tanto de que todo salga a la perfección.
Y no sólo en las cosas sino que en las relaciones laborales, familiares y amorosas.
Una lección que todo el tiempo se presenta en mi vida, la famosa ley de Murphy, pero que en realidad prefiero mentalizar más seguidamente como "Uno propone, pero Dios dispone"